martes, 30 de noviembre de 2010

causa internas y externas de la independencia de la nueva españa

El movimiento independiente comprendió en México un período de once años que va de 1810 a 1821 y las causas que lo motivaron fueron tanto internas como externas.

Causas Internas

Sociales: Las internas correpondieron, primero, a la desigualdad social; los criollos se sentían relegados a un segundo plano por los peninsulares, y fueron aquéllos los que dirigieron la revolución; los mestizos no eran tomados en cuenta debido a que en su gran mayoría eran fruto de relaciones ilegítimas; los indígenas, protegidos por las leyes de Indias, querían emanciparse de este tutelaje; las castas se encontraban en condiciones inferiores por su propio estado natual y en general el descontento era unánime. España ya no era la nación unitaria en su moralidad y costumbres, pues los borbones habían llevado una conducta política extraña.

Económicas: España había considerado siempre a América como parte de ella misma, y por ende había dejado en pie un sistema de monopolios, estancos y barreras que tendían a impedir el libre comercio exterior. Los impuestos eran muy elevados y España estaba en decadencia.

Causas Externas

A)Ideas de los enciclopedistas y economistas: Durante el siglo XVIII comenzaron a extenderse por Europa las ideas de los enciclopedistas y de los fisiócratas; los primeros hablaban de nuevos sistemas políticos con la soberanía del pueblo, libertad, tolerancia de la igualdad-tales eran los casos de Montesquieu, Voltaire y Rousseau, que ya no aceptaban el derecho divino de los reyes y querían la división de poderes. Los fisiócratas sostenían la libertad del comercio y la industria, pidiendo que se suprimieran barreras de aduana para que las mercancías fluyeran libremente sin la intervención del estado.


B)Otra de las causas externas. La Revolución Industrial que había triunfado en Inglaterra a fines del siglo XVII imponiendo el sistema maquinista sobre el artesanal y creando, además, una nueva clase social que fue la burguesía capitalista, la cual tuvo que hacer frente a los problemas del proletariado. Las potencias industrializadas tuvieron que competir por los mercados, al luchar por el abastecimiento de las materias primas

revolucion industrial

La Revolución Industrial fue un periodo histórico comprendido entre la segunda mitad del siglo XVIII y principios del XIX, en el que Inglaterra en primer lugar, y el resto de Europa continental después, sufren el mayor conjunto de transformaciones socioeconómicas, tecnológicas y culturales de la Historia de la humanidad, desde el Neolítico.
La economía basada en el trabajo manual fue reemplazada por otra dominada por la industria y la manufactura. La Revolución comenzó con la mecanización de las industrias textiles y el desarrollo de los procesos del hierro. La expansión del comercio fue favorecida por la mejora de las rutas de transportes y posteriormente por el nacimiento del ferrocarril. Las innovaciones tecnológicas más importantes fueron la máquina de vapor y la denominada Spinning Jenny, una potente máquina relacionada con la industria textil. Estas nuevas máquinas favorecieron enormes incrementos en la capacidad de producción. La producción y desarrollo de nuevos modelos de maquinaria en las dos primeras décadas del siglo XIX facilitó la manufactura en otras industrias e incrementó también su producción.
Así es que en la revolución industrial se aumenta la cantidad de productos y se disminuye el tiempo en el que estos se realizan, dando paso a la producción en serie, ya que se simplifican tareas complejas en varias operaciones simples que pueda realizar cualquier obrero sin necesidad de que sea mano de obra cualificada, y de este modo bajar costos en producción y elevar la cantidad de unidades producidas bajo el mismo costo fijo.

Contenido

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Causas

Máquina de vapor situada en el vestíbulo de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales de la UPM (Madrid).
La existencia de controles fronterizos más intensos evitaron la propagación de enfermedades y disminuyó la propagación de epidemias como las ocurridas en tiempos anteriores. La revolución agrícola británica hizo además más eficiente la producción de alimentos con una menor aportación del factor trabajo, alentando a la población que no podía encontrar trabajos agrícolas a buscar empleos relacionados con la industria y, por ende, originando un movimiento migratorio desde el campo a las ciudades así como un nuevo desarrollo en las fábricas. La expansión colonial del siglo XVII acompañada del desarrollo del comercio internacional, la creación de mercados financieros y la acumulación de capital son considerados factores influyentes, como también lo fue la revolución científica del siglo XVII. Se puede decir que se produjo en Inglaterra por su desarrollo económico.
La presencia de un mayor mercado doméstico debería también ser considerada como un catalizador de la Revolución industrial, explicando particularmente por qué ocurrió en el Reino Unido.
La invención de la máquina de vapor fue una de las más importantes innovaciones de la Revolución industrial. Hizo posible mejoramientos en el trabajo del metal basado en el uso de coque en vez de carbón vegetal. En el siglo XVIII la industria textil aprovechó el poder del agua para el funcionamiento de algunas máquinas. Estas industrias se convirtieron en el modelo de organización del trabajo humano en las fábricas.
Además de la innovación de la maquinaria, la cadena de montaje contribuyó mucho en la eficiencia de las fábricas.
  • Revolución agrícola: aumento progresivo de la producción gracias a la inversión de los propietarios en nuevas técnicas y sistemas de cultivo, además de la mejora del uso de fertilizantes.
  • El desarrollo del capital comercial: Las máquinas se aplicaron a los transportes y a la comunicación iniciando una enorme transformación. Ahora las relaciones entre patronos y trabajadores son únicamente laborales y con el fin de obtener beneficios.
  • Cambios demográfico-sociales: la modernización de la agricultura permitió un crecimiento demográfico debido a la mejora de la alimentación. También hubo adelantos en la medicina y en la higiene, de ahí que creciera la población. También hubo una migración del campo a la ciudad porque la ocupación en labores agrícolas disminuyó mientras crecía la demanda de trabajo en las ciudades.
Esta primera revolución se caracterizó por un cambio en los instrumentos de trabajo de tipo artesanal por la máquina de vapor, movida por la energía del carbón. La máquina exige individuos más cualificados, produce una reducción en el número de personas empleadas, arrojando de manera incesante masas de obreros de un ramo de la producción a otra. Especialmente del campo a la ciudad.

El comercio internacional

Economía industrial

Sin embargo, y a pesar de todos los factores anteriores, la Revolución industrial no hubiese podido prosperar sin el concurso y el desarrollo de los transportes, que llevarán las mercancías producidas en la fábrica hasta los mercados donde se consumían.
Estos nuevos transportes se hacen necesarios no sólo en el comercio interior, sino también en el comercio internacional, ya que en esta época se crean los grandes mercados nacionales e internacionales. El comercio internacional se liberaliza, sobre todo tras el Tratado de Utrecht (1713) que liberaliza las relaciones comerciales de Inglaterra, y otros países europeos, con la América española. Se termina con las compañías privilegiadas y con el proteccionismo económico; y se aboga por una política imperialista y la eliminación de los privilegios gremiales. Además, se desamortizan las tierras eclesiásticas, señoriales y comunales, para poner en el mercado nuevas tierras y crear un nuevo concepto de propiedad. La Revolución industrial generó también un ensanchamiento de los mercados extranjeros y una nueva división internacional del trabajo (DIT). Los nuevos mercados se conquistaron mediante el abaratamiento de los productos hechos con la máquina, por los nuevos sistemas de transporte y la apertura de vías de comunicación, así como también, mediante una política expansionista.
El Reino Unido fue el primero que llevó a cabo toda una serie de transformaciones que la colocaron a la cabeza de todos los países del mundo. Los cambios en la agricultura, en la población, en los transportes, en la tecnología y en las industrias, favorecieron un desarrollo industrial. La industria textil algodonera fue el sector líder de la industrialización y la base de la acumulación de capital que abrirá paso, en una segunda fase, a la siderurgia y al ferrocarril.
A mediados del siglo XVIII, la industria británica tenía sólidas bases y con una doble expansión: las industrias de bienes de producción y de bienes de consumo. Incluso se estimuló el crecimiento de la minería del carbón y de la siderurgia con la construcción del ferrocarril. Así, en Gran Bretaña se desarrolló de pleno el capitalismo industrial, lo que explica su supremacía industrial hasta 1870 aproximadamente, como también financiera y comercial desde mediados de siglo XVIII hasta la Primera Guerra Mundial (1914). En el resto de Europa y en otras regiones como América del Norte o Japón, la industrialización fue muy posterior y siguió pautas diferentes a la británica.
Unos países tuvieron la industrialización entre 1850 y 1914: Francia, Alemania y Bélgica. En 1850 apenas existe la fábrica moderna en Europa continental, sólo en Bélgica hay un proceso de revolución seguido al del Reino Unido. En la segunda mitad del siglo XIX se fortalece en Turingia y Sajonia la industrialización de Alemania.
Otros países siguieron un modelo de industrialización diferente y muy tardía: Italia, Imperio austrohúngaro, España o Rusia. La industrialización de éstos se inició tímidamente en las últimas décadas del siglo XIX, para terminar mucho después de 1914.

Etapas de la Revolución industrial

La Revolución industrial estuvo dividida en dos etapas: La primera del año 1750 hasta 1840, y la segunda de 1880 hasta 1914. Todos estos cambios trajeron consigo consecuencias tales como:
  1. Demográficas: Traspaso de la población del campo a la ciudad (éxodo rural) — Migraciones internacionales — Crecimiento sostenido de la población — Grandes diferencias entre los pueblos — Independencia económica
  2. Económicas: Producción en serie — Desarrollo del capitalismo — Aparición de las grandes empresas (Sistema fabril) — Intercambios desiguales
  3. Sociales: Nace el proletariado — Nace la Cuestión social
  4. Ambientales: Deterioro del ambiente y degradación del paisaje — Explotación irracional de la tierra.
A mediados del siglo XIX, en Inglaterra se realizaron una serie de transformaciones que hoy conocemos como Revolución industrial dentro de las cuales las más relevantes fueron:
  • La aplicación de la ciencia y tecnología permitió el invento de máquinas que mejoraban los procesos productivos.
  • La despersonalización de las relaciones de trabajo: se pasa desde el taller familiar a la fábrica.
  • El uso de nuevas fuentes energéticas, como el carbón y el vapor.
  • La revolución en el transporte: ferrocarriles y barco de vapor.
  • El surgimiento del proletariado urbano.

La industrialización que se originó en Inglaterra y luego se extendió por toda Europa no sólo tuvo un gran impacto económico, sino que además generó enormes transformaciones sociales.
Proletariado urbano. Como consecuencia de la revolución agrícola y demográfica, se produjo un éxodo masivo de campesinos hacia las ciudades; el antiguo agricultor se convirtió en obrero industrial. La ciudad industrial aumentó su población como consecuencia del crecimiento natural de sus habitantes y por el arribo de este nuevo contingente humano. La carencia de habitaciones fue el primer problema que sufrió esta población marginada socialmente; debía vivir en espacios reducidos sin comodidades mínimas y carentes de higiene. A ello se sumaban jornadas de trabajo, que llegaban a más de catorce horas diarias, en las que participaban hombres, mujeres y niños con salarios miserables, y carentes de protección legal frente a la arbitrariedad de los dueños de las fábricas o centros de producción. Este conjunto de males que afectaba al proletariado urbano se llamó la Cuestión social, haciendo alusión a las insuficiencias materiales y espirituales que les afectaban.
Burguesía industrial. Como contraste al proletariado industrial, se fortaleció el poder económico y social de los grandes empresarios, afianzando de este modo el sistema económico capitalista, caracterizado por la propiedad privada de los medios de producción y la regulación de los precios por el mercado, de acuerdo con la oferta y la demanda.
En este escenario, la burguesía desplaza definitivamente a la aristocracia terrateniente y su situación de privilegio social se basó fundamentalmente en la fortuna y no en el origen o la sangre. Avalados por una doctrina que defendía la libertad económica,los empresarios obtenían grandes riquezas, no sólo vendiendo y compitiendo, sino que además pagando bajos salarios por la fuerza de trabajo aportada por los obreros.
Las propuestas para solucionar el problema social. Frente a la situación de pobreza y precariedad de los obreros, surgieron críticas y fórmulas para tratar de darles solución; por ejemplo, los socialistas utópicos, que aspiraban a crear una sociedad ideal, justa y libre de todo tipo de problemas sociales (para algunos, el comunismo). Otra propuesta fue el socialismo científico de Karl Marx, que proponía la revolución proletaria y la abolición de la propiedad privada (marxismo); también la Iglesia católica, a través del Papa León XIII, dio a conocer la Encíclica Rerum Novarum (1891), primera Encíclica social de la historia, la cual condenaba los abusos y exigía a los estados la obligación de proteger a lo más débiles. A continuación, un fragmento de dicha encíclica:
« (...) Si el obrero presta a otros sus fuerzas a su industria, las presta con el fin de alcanzar lo necesario para vivir y sustentarse y por todo esto con el trabajo que de su parte pone, adquiere el derecho verdadero y perfecto, no solo para exigir un salario, sino para hacer de este el uso que quisiere (...) »
Estos elementos fueron decisivos para el surgimiento de los movimientos reivindicativos de los derechos de los trabajadores. Durante el siglo XX en medio de los procesos de democratización, el movimiento obrero lograba que se reconocieran los derechos de los trabajadores y su integración a la participación social. Otros ejemplos de tendencias que buscaron soluciones fueron los nacionalismos, así como también los fascismos en los cuales se consideraban a los obreros y trabajadores como una parte fundamental en el desarrollo productivo de la nación, por lo que debían ser protegidos por el Estado.

Principios fundamentales de la industria

Uno de los principios fundamentales de la industria moderna es que nunca considera a los procesos de producción como definitivos o acabados. Su base técnico-científica es revolucionaria, generando así, el problema de la obsolescencia tecnológica en períodos cada vez más breves. Desde esta perspectiva puede afirmarse que todas las formas de producción anteriores a la industria moderna (artesanía y manufactura) fueron esencialmente conservadoras, al trasmitirse los conocimientos de generación en generación sin apenas cambios. Sin embargo, esta característica de obsolescencia e innovación no se circunscribe a la ciencia y la tecnología, sino debe ampliarse a toda la estructura económica de las sociedades modernas. En este contexto la innovación es, por definición, negación, destrucción, cambio, la transformación es la esencia permanente de la modernidad. Principios fundamentales de la industria moderna es que nunca considera a los procesos de producción como definitivos o acabados. - El desarrollo de nuevas tecnologías, como ciencias aplicadas, en un receptivo clima social, es el momento y el sitio para una revolución industrial de innovaciones en cadena, como un proceso acumulativo de tecnología, que crea bienes y servicios, mejorando el nivel y la calidad de vida. Son básicos un capitalismo incipiente, un sistema educativo y espíritu emprendedor. La no adecuación o correspondencia entre unos y otros crea desequilibrios o injusticias. Parece ser que este desequilibrio en los procesos de industrialización, siempre socialmente muy inestables, es en la práctica inevitable, pero mensurable para poder construir modelos mejorados.
Al parecer, Colón sostenía que podía alcanzarse el lejano oriente (las Indias) desde Europa viajando hacia el Oeste, y que era posible realizar el viaje por mar con posibilidades de éxito.[4] En aquella época, los portugueses estaban buscando una ruta directa a Asia oriental bordeando África y se habían otorgado el monopolio de la navegación por el Atlántico a excepción de las islas Canarias.[5] [6]
Desde los antiguos griegos (Eratóstenes) se conocía la medida de la circunferencia de la Tierra. Al parecer, la hipótesis de Colón sobre la posibilidad del viaje se basaba en cálculos erróneos sobre el tamaño de la esfera, ya que suponía que era más pequeña de lo que realmente es.[7] [8]
Otras teorías sostienen que Colón había oído datos, por habladurías de marinos, sobre la existencia de tierras mucho más cercanas a Europa de lo que se suponía científicamente que estaba Asia, y que emprendió la tarea de alcanzarla para comerciar sin depender de Génova ni de Portugal. Una de ellas, conocida como la teoría del prenauta, sugiere que durante el tiempo que Colón pasó en las islas portuguesas del Atlántico, se hizo cargo de un marino portugués o castellano moribundo cuya carabela había sido arrastrada desde el golfo de Guinea hasta el Caribe por las corrientes.[9] Para algunos investigadores podría tratarse de Alonso Sánchez de Huelva[10] [11] aunque según otras fuentes podría ser portugués o vizcaíno.[12] Esta teoría sugiere que el prenauta le confió a Colón el secreto.[13] [14] [15] Según algunos estudiosos, la prueba más contundente a favor de esta teoría son las Capitulaciones de Santa Fe, ya que hablan de las tierras "descubiertas"[16] al tiempo que otorgan a Colón una serie de privilegios no otorgados hasta entonces a nadie.
Lo seguro es que Colón no sólo alcanzó América, sino que regresó a Europa, realizando un total de cuatro viajes y dando origen a una ruta para la navegación periódica y segura entre Europa y América. Aunque es sabido que los siberianos habían llegado a América en el Pleistoceno, y que existe documentación que habla sobre posibles viajes anteriores realizados por los cartagineses,[17] andalusíes,[18] vikingos o chinos,[19] es a partir de los viajes de Colón, y otros exploradores y conquistadores que le sucedieron, cuando se establecieron vínculos permanentes y se puede hablar de "descubrimiento", al haber reconocimiento de las naciones implicadas y testimonios contrastables en la época. A raíz de ello, algunas potencias europeas invadieron parte del territorio americano, imponiendo su dominio sobre varias civilizaciones y pueblos allí instalados, como los imperios inca y azteca, entre otros. Como resultado, fueron destruidas la mayor parte de esas culturas, incluyendo las técnicas de escritura y los testimonios escritos, sus conocimientos científicos y artísticos, sus religiones y la mayor parte de sus idiomas. También se impusieron varios idiomas y religiones europeos, principalmente las diversas variantes del cristianismo.
Colón proyectó su viaje con el fin de traer de Oriente mercancías, en especial especias y oro.[n. 1] Las especias, seda y otros productos habían llegado siempre por la ruta que atravesaba Asia hasta Europa, por Asia Menor y Egipto, pero a partir de la expansión del Imperio otomano esta vía se hizo difícil y quedó monopolizada por ellos y sus socios, los mercaderes italianos. Portugal y Castilla querían esas mercancías sin intermediarios. Los portugueses (cuya Reconquista acabó en el siglo XIII) se habían lanzado a navegar y habían encontrado el paso por el cabo de Buena Esperanza, con ansias de crear su propio monopolio para competir con los comerciantes italianos, por lo que Castilla, al terminar su reconquista, hubo de buscar una ruta nueva.
Su llegada a América abrió también camino al envío hacia Europa de gran cantidad de alimentos que se cultivaban en esas tierras, como el maíz, la patata, el cacao, el tabaco, el pimiento, el zapallo, la calabaza, el poroto (nuevas variedades de judía o frijol) o la vainilla, entre otros. Los investigadores han estimado que tres quintas partes de los cultivos actuales de todo el mundo fueron importadas desde América.[20] En sentido inverso, la expedición colombina conllevó posteriormente la llegada a América de la rueda, el hierro, el caballo, el cerdo, el asno, el café, la caña de azúcar y las armas de fuego entre otras.
En su primer viaje, el navegante alcanzó la isla de San Salvador (llamada Guanahani por los habitantes que encontraron), en las actuales Bahamas, después de dos meses de travesía, visitando después Cuba y La Española. Volvió a España siete meses después de su partida. En su último viaje sólo tardó un mes y cuatro días en alcanzar las costas de América.

Biografía

Origen

Monumento a Colón en Barcelona. Vista nocturna.
Monumento a Colón denominado en inglés "Columbus Circle" (círculo de Colón), en Manhattan. Diseño del escultor italiano Gaetano Russo, el monumento central fue dedicado en 1892, como parte de las conmemoraciones que se realizaron el IV Centenario del Descubrimiento de América en Estados Unidos.
El origen de Cristóbal Colón es un enigma sobre el que no existe unanimidad entre historiadores e investigadores, entre otras razones por la confusión y pérdida de documentación referente a sus orígenes y ascendencia. Además su propio hijo, Hernando Colón, en su "Historia del almirante Don Cristóbal Colón" oscureció aún más su patria de origen afirmando que su progenitor no quería que fuesen conocidos su origen y patria.[2] [21] Por ésta, entre otras razones, han surgido múltiples teorías sobre el lugar de nacimiento de Colón.
La tesis apoyada mayoritariamente mantiene que Cristoforo Colombo nació el año 1451 en Savona, en la República de Génova. Sus padres serían Doménico Colombo -maestro tejedor y luego comerciante- y Susanna Fontanarrosa. De los cinco hijos del matrimonio, dos, Cristoforo y Bartolomeo, tuvieron pronto vocación marinera. El tercero fue Giacomo, que aprendió el oficio de tejedor. Respecto a los dos restantes, Giovanni murió joven y la única mujer no dejó rastro.[22] Existen actas notariales y judiciales que defienden esta tesis.[23] Además el mismo Colón declara ser genovés, en el documento denominado "Fundación de Mayorazgo",[24] [25] pero diversos autores e investigadores indican que probablemente esta declaración sería interesada por los pleitos que mantuvieron sus descendientes con la corona,[26] y por ello lo declararon como falso o apócrifo, sin embargo otros investigadores a principios del siglo XX encontraron en el Archivo de Simancas documentos que, según ellos, mostraban la autenticidad de este documento.[27] [28]
Por otro lado algunos autores e investigadores han defendido otras hipótesis sobre el origen de Colón. Una de ellas es la hipótesis catalana; Luis Ulloa, historiador peruano que residió en Barcelona varios años, afirmaba que Colón era de origen catalán[29] y de tradición marinera, basándose, entre otras razones, en que en sus escritos, todos en lengua castellana, existen giros lingüísticos propios del catalán.[30] Para Ulloa, Cristóbal Colón fue un noble catalán que se llamaría realmente Joan Colom, un navegante enemigo de Juan II de Aragón, contra el que luchó al servicio de Renato de Anjou, aspirante al trono y que además sería el supuesto John Scolvus que habría llegado al norte de América en el año 1476, que posteriormente le ofrecería el proyecto del descubrimiento a Fernando el Católico para beneficio de Cataluña.[31] Esta teoría ha sido seguida, ampliada o modificada por diversos autores, en su mayoría historiadores e investigadores catalanes, aunque también existen investigadores de otros países como el estadounidense Charles Merrill que han apoyado esta tesis.[32]
De la hipótesis catalana han surgido diferentes corrientes como las tesis Baleares, una de ellas, la mallorquina, identifica a Colón con un hijo natural del príncipe de Viana nacido en Felanitx, Mallorca.[33] [34] Sin embargo el investigador, periodista y piloto mercante, Nito Verdera, rechazó esta tesis.[35] [36] Verdera, asimismo, mantiene la teoría de que Colón sería criptojudío y nacido en Ibiza.[37]
Otra hipótesis indica que Colón era de origen gallego, Celso García de la Riega sostuvo esta teoría[38] basándose en documentos de la época colombina,[39] sin embargo, posteriormente fueron rechazados por los estudios realizados tanto por el paleógrafo Eladio Oviedo Arce,[40] como por el de la Real Academia de la Historia[39] en el que concluyeron que dichos documentos, o bien eran falsos, o habían sido manipulados en fechas posteriores a su creación.[41]
También existe la teoría del origen portugués, que se basa en la interpretación del anagrama de la firma de Colón o en la existencia de supuestos portuguesismos en sus escritos. El experto filólogo Ramón Menéndez Pidal confirmó que eran portuguesismos[42] en contra de quienes mantenían que eran galleguismos o catalanismos,[43] [44] aunque el historiador Antonio Romeu de Armas matizó que esto se debería no a que fuera nacido en Portugal sino a una naturalización debida a los años que permaneció en aquel país.[45] Existen, además, conjeturas indicando un posible origen sefardí, de acuerdo a la tesis del historiador Salvador de Madariaga.[46] Para Madariaga, Colón sería genovés, pero sus ascendientes serían judíos catalanes huidos en las persecuciones de finales del siglo XIV.[47] [48] Colón sería un judío converso, razón que explicaría, según Madariaga, su empeño en ocultar sus orígenes.
Asimismo han surgido otras teorías, si bien más minoritarias, sobre el supuesto origen español de Colón. Aparte de las hipótesis citadas que proponen un origen catalán, gallego o balear, existen otras teorías que le atribuyen un origen andaluz, concretamente de Sevilla,[49] castellano de Guadalajara,[50] [51] extremeño de Plasencia[52] [53] o vasco.[54] Otros países también se disputan ser la cuna del almirante, siendo de posible origen griego;[55] inglés;[56] corso;[57] noruego[58] o croata.[59] [60]

Lengua de Colón

Como se ha indicado, sobre la lengua materna de Colón también existe controversia ya que, según los investigadores, es un importante apoyo para una u otra teoría sobre su ciudad natal. Para tratar de fijar sus orígenes reales, se han dado diversas razones en todos los sentidos. La mayor parte de sus escritos están en castellano,[61] pero con evidentes giros lingüísticos procedentes de otras lenguas de la península Ibérica que, siguiendo a Menéndez Pidal,[42] muchos coinciden en señalar como portuguesismos.[44] [61] Hay varios investigadores y lingüistas, tanto de Galicia como de Cataluña o de Baleares, que apoyan la hipótesis de que son galleguismos[38] o catalanismos.[62] [63]
No parecen existir escritos en italiano realizados por Colón, salvo alguna nota marginal, al parecer con una redacción deficiente. El latín tampoco parecía dominarlo y lo escribía con influencia hispánica y no italiana.[61]
Historiadores como Consuelo Varela o Arranz Márquez opinan que se trata de un típico hombre de la mar que se expresa en diversas lenguas sin llegar a dominar bien ninguna, o que quizá hablase la lingua franca o jerga levantisca.[63]

Primeros años

A la izquierda se ve la firma de Colón como "Xpo Ferens", a la derecha su firma como "Al Almirante".
Según la teoría del origen genovés, la más apoyada por los historiadores, Cristóbal Colón sería la castellanización del italiano Cristoforo Colombo.[2] [64] Cristoforo puede traducirse por Cristóbal, el que lleva a Cristo, y Colón en italiano significa paloma.[65] En una de las firmas de Colón se puede leer "Xpo Ferens", que, según algunos investigadores, significa "portador de Cristo".[66] [67]
Según esa hipótesis, su educación literaria fue escasa y se introdujo en la navegación a temprana edad. De ser cierta esta teoría, entre 1474 y 1475 habría viajado a la isla de Quíos (Quío o Chío),[68] posesión genovesa en el mar Egeo,[69] como marino y probablemente también como comerciante. Por otra parte, su hijo, Hernando Colón asegura que su padre aprendió letras y estudió en Pavía, lo que le permitía entender a los cosmógrafos.[70]
La parte de la historia más documentada de Cristóbal Colón comienza en 1476, cuando alcanzó las costas portuguesas, al parecer víctima de un naufragio en un combate naval durante la Guerra de Sucesión Castellana.[71]

El proyecto

Mapa atribuido a Toscanelli.
Es difícil estimar en qué momento nació el proyecto de Colón de llegar a Cipango (el moderno Japón) y a las tierras del Gran Kan navegando hacia Occidente, pero puede fecharse después de su matrimonio y antes de 1481.[31] [72]
Probablemente tuvo conocimientos de los informes del matemático y médico florentino Paolo dal Pozzo Toscanelli[73] [74] sobre la posibilidad de llegar a las Indias por el oeste,[75] redactados a instancias del rey de Portugal, Alfonso V, interesado en el asunto.[76] [77]
Sea como fuere, Colón tuvo acceso a una carta de Toscanelli que iba acompañada de un mapa en que se trazaba el trayecto a seguir al oriente asiático, incluidas todas las islas que se suponían debían estar en el trayecto.[78] Este mapa y las noticias de Toscanelli estaban basados principalmente en los viajes de Marco Polo. Señalaba este último que entre el extremo occidental de Europa y Asia la distancia no era excesiva, estimando en torno a 6.500 leguas marinas el espacio entre Lisboa y Quinsay, y desde la legendaria Antilia al Cipango sólo 2.500 millas, lo que facilitaba la navegación.[77] Se conocen dos cartas dirigidas por Toscanelli a Colón recogidas por el padre Las Casas en su Historia de las Indias,[75] sin embargo también existe polémica sobre la autenticidad de las mismas.[79] [80]
Los libros que se conservan de la biblioteca de Colón aportan luz sobre lo que influyó en sus ideas, por su costumbre de subrayar los libros y se deduce que los más subrayados serían los más leídos. Entre los que tienen más anotaciones están el Tractatus de Imago Mundi de Pierre de Ailly, la Historia Rerum ubique Gestarum de Eneas Silvio Piccolomini y especialmente Los Viajes de Marco Polo, que le dieron la idea de cómo era el oriente que soñaba encontrar.
Colón se basaba en que la Tierra tenía una circunferencia de 29.000 km, según la "medición" de Posidonio y la medida del grado terrestre de Ailly, sin considerar que éste hablaba de millas árabes y no italianas,[7] que son más cortas,[81] de modo que cifraba esa circunferencia en menos de las tres cuartas partes de la real, que por otro lado era la aceptada científicamente desde tiempos de Eratóstenes. Como resultado de lo anterior, según Colón, entre las Canarias y Cipango debía haber unas 2.400 millas marinas,[81] cuando, en realidad, hay 10.700.

El navegante del Atlántico

Retrato de Cristóbal Colón conservado en la biblioteca del Congreso de los Estados Unidos de América.
En 1476, viajando rumbo a Inglaterra, su nave naufragó en una batalla entre mercantes de caucho y el corsario Casenove, también denominado "Colón el viejo".[71] Se salvó a nado y alcanzó las costas del Algarve.[82] Desde allí partió a Lisboa, en busca de la ayuda de su hermano Bartolomé y de otros conocidos.[83]
Hasta 1485 vivió en Portugal como agente de la casa Centurione de Madeira[84] [85] y realizó numerosos viajes con destinos variados, incluida Génova, Inglaterra e Irlanda. Posiblemente en este viaje, en el año 1477, llegó a Islandia y escuchó leyendas de un camino hacia Terranova viajando hacia el oeste.[86] [87] Parece que también viajó por las rutas que los portugueses frecuentaban en las costas occidentales de África como Guinea y seguramente habría estado en las Canarias, lo cual implica que también conocería la "Volta da Mina", ruta que seguían los marineros portugueses cuando regresaban a su país desde el golfo de Guinea y con ello los alisios del Atlántico.[85] [88]
Entre 1479 y 1480 contrajo matrimonio con doña Felipa Moniz,[89] hija del colonizador de las islas Madeira, Bartolomé de Perestrello,[90] [91] probablemente en Lisboa. Una vez casado vivió en Porto Santo y en Madeira,[92] lo que hace suponer que viajara también a las Azores. Su relación con Felipa, de la clase alta portuguesa, le abriría puertas para la preparación de su proyecto.[85] En 1480 tuvieron su único hijo, Diego Colón.[93]

La búsqueda de patronazgo

Portugal

Monasterio de La Rábida, Palos de la Frontera (Huelva).
Monumento a Cristóbal Colón inaugurado con motivo del 500 aniversario de su fallecimiento, situado en los jardines exteriores del Monasterio de La Rábida.
Entre 1483 y 1485 ofreció por primera vez su proyecto al monarca de Portugal, el cual encargó que fuera analizado por una junta de expertos, denominada Junta dos Matemáticos que finalmente desestimó la empresa.[94] [95] Sin embargo, el rey Juan II no quiso que se cerraran totalmente las puertas para futuras negociaciones y posiblemente concediese mayor veracidad al proyecto colombino que el que le dio la junta examinadora. Hernando Colón escribió en su Historia del Almirante que Juan II envió secretamente una carabela siguiendo el rumbo que Colón había indicado, pero regresaron sin haber conseguido llegar a ninguna tierra nueva.[96]
En 1485, al fallecer su esposa Felipa[91] y por la falta de apoyo a su proyecto, abandonó Portugal y viajó hacia Castilla en busca de patrocinio.[31]

Castilla

Si bien los primeros cronistas[97] y algunos testimonios de los pleitos colombinos[n. 2] reflejan que Colón llegó a Castilla con su hijo Diego Colón, entrando por el Puerto de Palos hacia finales del año 1484 o comienzos de 1485,[31] [97] [98] [99] hay algunos autores que no admiten estos sucesos como ciertos, [n. 3] [100] [101] aunque es la versión apoyada más frecuentemente. Según dicha versión, en el vecino monasterio de La Rábida, hizo amistad en primera instancia con fray Antonio de Marchena y años más tarde con fray Juan Pérez, a quienes confió sus planes. Los frailes lo apoyaron y recomendaron a fray Hernando de Talavera, confesor de la reina Isabel I.[102] En la vecina villa de Moguer también encontró el apoyo de la abadesa del convento de Santa Clara, Inés Enríquez, tía del rey Fernando el Católico. Colón se dirigió a la corte, establecida por entonces en Córdoba, y entabló relaciones con importantes personajes del entorno real.[31]
Si bien el Real Consejo rechazó su proyecto, consiguió ser recibido en enero de 1486, gracias al valimiento de Hernando de Talavera, por la reina Isabel, a quien expuso sus planes.[103] La reina se interesó por la idea, pero quiso que, previamente, un consejo de doctos varones, presidido por Talavera, diera un dictamen sobre la viabilidad del proyecto, mientras asignaba a Colón, pobre de recursos, una subvención de la corona.[104] [105]
El Consejo se reunió en la Universidad de Salamanca y, basándose en la circunferencia aceptada de la Tierra desde Eratóstenes, que era de 252.000 estadios (tomando el estadio egipcio, tendría un error del 1% sobre la medida aceptada ahora de 40.000 km) dictaminó que la distancia que había a las verdaderas Indias era excesiva y determinó la viabilidad del proyecto como absolutamente imposible.[106] [107] [108] También parece que las exigencias económicas y políticas expuestas por Colón eran muy altas, como se vio en las Capitulaciones de Santa Fe.[109]
La reina llamó entonces a Colón, diciéndole que no descartaba totalmente su plan. Mientras el navegante esperaba, se dedicó a vender mapas y libros para mantenerse económicamente.[110]
Conoció en esa época a la cordobesa Beatriz Enríquez de Arana, que vivía con un primo y trabajaba como tejedora. Nunca se casaron, aunque a su muerte Colón le legó su fortuna e hizo que su primer hijo, Diego, la tratara como a su madre verdadera. Tuvieron un hijo, Hernando o Fernando Colón, quien viajó con su padre a América en su cuarto viaje y años más tarde escribió la Historia del Almirante Don Cristóbal Colón, una biografía de su padre quizás excesivamente elogiosa.[111] [112]
Colón pasó nuevamente a Portugal a intentar suerte[113] pero, por las razones antedichas, sin resultado. Talavera le recomendó ofrecer su proyecto a Luis de la Cerda, duque de Medinaceli, quien se mostró interesado y acogió a Colón durante dos años en su palacio de El Puerto de Santa María.[114] [103] [113] Sin embargo, al ser consultada, la reina mandó llamar a Colón y le prometió ocuparse de su plan tan pronto como se terminara la conquista de Granada.
Deza y Colón. Detalle del monumento a Colón de Madrid (A. Mélida, 1885).
En diciembre de 1491, Colón llegaba al campamento real de Santa Fe de Granada. Su proyecto fue sometido a una nueva junta, convocada por la reina, pero nuevamente se rechazó.[109] Parte importante de la oposición era por las exigencias desmedidas de Colón.[31] [115] En esos momentos intervinieron Luis de Santángel y Diego de Deza, quienes ganaron para su causa al rey de Castilla, Fernando, consiguiendo su apoyo.[116] [117]
Las arcas de los monarcas, debido a las distintas campañas bélicas y en especial la toma de Granada, no pasaban por sus mejores momentos, es por ello que Luis de Santángel, escribano de ración, se ofreció a prestar el dinero que le correspondía aportar a la corona, 1.140.000 maravedís.[118] [119] [120] Consta en el Archivo de Simancas la devolución de esta cantidad a Luis de Santángel.[n. 4]

Las Capitulaciones de Santa Fe

Artículo principal: Capitulaciones de Santa Fe
Las negociaciones entre Colón y la Corona se realizaron a través del secretario de la Corona de Aragón, Juan de Coloma, y de fray Juan Pérez, en representación de Colón.[121] [122] [123] El resultado de las negociaciones fueron las Capitulaciones de Santa Fe, del 17 de abril de 1492.[n. 5] [124]
Por este documento Colón obtenía las siguientes prebendas:
  • El título de Almirante en todas las tierras que descubriese o ganase en la mar Océana, con carácter hereditario y con el mismo rango que el Almirante de Castilla.
  • El título de virrey (hereditario) y gobernador general en todas las islas o tierras firmes que descubriera o ganara en dichos mares, recibiendo el derecho de proponer ternas para el gobierno de cada una de ellas.
  • El diezmo (diez por ciento) del producto neto de la mercadería comprada, ganada, hallada o trocada dentro de los límites del Almirantazgo, quedando un quinto para la corona.
  • La jurisdicción comercial de los pleitos derivados del comercio en la zona de su almirantazgo, según correspondiese a tal oficio.
  • El derecho a contribuir con un octavo de la expedición y participar de las ganancias en esa misma proporción.
Estatua de los Hermanos Pinzón en Palos de la Frontera; al fondo se observa la Fontanilla y la Iglesia de San Jorge Mártir.
Las Capitulaciones fueron firmadas en Santa Fe de Granada el 30 de abril de 1492, a la vez que se concedía a Colón el título de don.
Se despacharon, además, diversas cédulas para la organización del viaje.[125] Según una de ellas, Colón sería Capitán Mayor de la Armada,[126] constituida por tres navíos.[127] Otra cédula era una Real Provisión dirigida a ciertos vecinos de la villa de Palos y decía que debían proporcionar dos carabelas equipadas y tripuladas como pago de una sanción impuesta a dichos vecinos.[n. 6] [128]

Colón en Palos, intervención de Martín Alonso Pinzón

Cuando Colón llegó a la villa de Palos se encontró con la oposición de los vecinos, que desconfiaban del extraño. Una Real Provisión dirigida a Diego Rodríguez Prieto y otros vecinos de la villa, en la que los sancionaba a servir a la corona con dos carabelas durante dos meses,[n. 6] [129] [130] fue leída en la puerta de la Iglesia de San Jorge,[n. 7] [131] donde estaba situada la plaza pública. También hubo problemas en el reclutamiento de marineros, por ello Colón recurrió a una de las provisiones expedidas por los monarcas en la que se le concedió permiso para reclutar marineros entre los encarcelados, aunque finalmente esto no fue necesario.[n. 8] [132] [133] Por fin, los religiosos de La Rábida, en especial fray Juan Pérez y fray Antonio de Marchena, lograron solucionar el problema de la recluta de marineros, al poner en contacto a Colón con Martín Alonso Pinzón, destacado navegante local, que apoyó la posibilidad del viaje, contra lo que la gente pensaba del proyecto.[134] También Pero Vázquez de la Frontera, viejo marino de la villa muy respetado por su experiencia y amigo de Martín Alonso, influyó de manera importante para que el mayor de los Pinzón se decidiera a apoyar la empresa.[135]
Martín Alonso aportó de su hacienda personal medio millón de maravedíes, la tercera parte de los gastos en metálico de la empresa.[136] [137] Asimismo desechó los barcos que había embargado Colón[138] y despidió también a los hombres que éste había enrolado, escogió para la empresa otras dos carabelas,[139] la Pinta y la Niña, ya que sabía que eran muy veleras y "aptas para el oficio de navegar" porque las tenía arrendadas,[140] hizo partícipes a sus hermanos y, además, fue por Palos, Moguer y Huelva, convenciendo a sus parientes y amigos de que se enrolasen, consiguiendo con ello la tripulación necesaria.[138] Destacadas familias de marineros de la zona se unieron a la empresa, como los Niño de Moguer, los Quintero de Palos y otros marinos de prestigio que fueron decisivos para el definitivo reclutamiento de la tripulación.[141] [142]

Viajes a las Indias

Viajes de Colón.
Artículo principal: Descubrimiento de América
Cristóbal Colón realizó un total de cuatro viajes a lo que hoy se conoce como América:

Primer viaje (3 de agosto de 1492-15 de marzo de 1493)

Artículo principal: Primer Viaje de Colón
Salida del puerto de Palos, obra de Evaristo Domínguez, en el Ayuntamiento de Palos de la Frontera.
Primer viaje.
Llegada de Cristóbal Colón a América. Primer desembarco de Cristóbal Colón en América, por Dióscoro Puebla.1862
Cristóbal Colón ante los Reyes Católicos en la corte de Barcelona (V.Turgis, siglo XIX).
Finalizados todos los preparativos, la expedición salió de Palos de la Frontera (Huelva) el 3 de agosto de 1492, con las carabelas La Pinta y La Niña, y con la nao Santa María con una tripulación de unos 90 hombres. En diversas pinturas y otras obras artísticas se ha reflejado la presencia de algún sacerdote o religioso, sin embargo en esta primera expedición no viajó ningún clérigo entre la tripulación.[142] [143] [144]
Estuvo en las Islas Canarias hasta el 6 de septiembre, concretamente en La Gomera (visitando a Beatriz de Bobadilla y Ossorio, gobernadora de la isla) y en Gran Canaria, arreglando el timón de La Pinta y sustituyendo sus velas triangulares originales por unas cuadradas, lo que la convirtió en la carabela más rápida de la flotilla.[n. 9]
La expedición no resultó fácil para nadie y durante la misma hubo varios conatos de motines. Entre el 13 y el 17 de septiembre experimentaron el efecto de la declinación magnética.[145] El 22 de septiembre envió Colón su carta de navegación a Pinzón.[n. 10] La noche del 6 al 7 de octubre se produce un intento de motín en la Santa María que fue sofocado con la ayuda de los Pinzón. Sin embargo entre el 9 de octubre y 10 de octubre el descontento se extiende al resto de la expedición, tomando los capitanes la determinación de que se volverían en el plazo de 3 días de no divisar tierra.[146] [147] El 12 de octubre, cuando la tripulación ya estaba inquieta por la larga travesía sin llegar a ninguna parte, el grumete Rodrigo de Triana dio el famoso grito de: "¡tierra a la vista!". Sobre este episodio también existe controversia entre los historiadores,[148] ya que los reyes habían ofrecido 10.000 maravedís al primero que avistara tierra, sin embargo este premio lo recibió Colón quien, según su diario de a bordo,[n. 11] habría visto "lumbre" unas horas antes que Rodrigo de Triana.[149] Llegaron a una isla llamada Guanahani, a la que rebautizó como «San Salvador», en el archipiélago de las Bahamas.
También desembarcó en la isla de Cuba y en La Española. En las orillas de ésta, el 25 de diciembre de 1492, se hundió la nao capitana, la Santa María. Sus restos fueron usados para construir el Fuerte de La Navidad, constituyendo así el primer asentamiento español en América.[150]
Las dos carabelas, al mando de Colón, regresaron a España. En el viaje de regreso sufrieron una fuerte tempestad que hizo que las naves se separasen, llegando la Pinta en primer lugar a Bayona el día 1 de marzo de 1493 y la Niña hizo lo propio llegando el día 4 de marzo a Lisboa.[151] [152] El día 9 de marzo, Colón se entrevistó con el rey de Portugal para convencerle de que la expedición no interfería con sus propiedades atlánticas[n. 12] y después partió para Andalucía.
Finalmente, el 15 de marzo arribaron al puerto de Palos ambas naves con una diferencia de pocas horas una de otra. A los pocos días falleció Martín Alonso Pinzón, el principal socio de Colón en este viaje, que fue enterrado probablemente en La Rábida, según era su voluntad.[n. 13] [153] [154]
Se sabe que tanto Pinzón como Colón enviaron noticias de su llegada a los Reyes, que se encontraban en Barcelona.[155] En esta ciudad apareció impresa, probablemente a principios de abril, una carta de Colón anunciando el Descubrimiento dirigida a Luis de Santángel[156] fechada a 15 de febrero, cuando todavía estaban en alta mar. Una semanas más tarde se imprimió en Roma una carta muy similar, dirigida al tesorero Gabriel (o Rafael) Sánchez y traducida al latín por Leandro de Cozco.[157] [158] [159] Esta obra se difundió rápidamente por toda Europa y fue traducida al italiano y al alemán.
Escudo de armas concedido por los Reyes Católicos.
En abril de 1493, Colón fue recibido por los Reyes Católicos en Barcelona, donde explicó su llegada por el oeste a lo que él creía era la India.
Varios años después los europeos irían dándose cuenta de que las tierras a las que había llegado Colón no estaban conectadas por tierra con Asia, sino que formaban un continente aparte al que se le empezó a llamar "América" a partir de 1507.
El 20 de mayo los reyes, entre los premios y dignidades otorgados a Colón le concedieron esta ampliación de su escudo de armas primitivo:
El Castillo de color dorado en campo verde, en el cuadro del escudo de vuestras armas en lo alto a la mano derecha; y en el otro cuadro alto a la mano izquierda un Leon de purpura en campo blanco rampando de verde, y en el otro cuadro bajo a la mano derecha unas islas doradas en ondas de mar, y en el otro cuadro bajo a la mano izquierda las armas vuestras que soliades tener. Las cuales armas seran conocidas por vuestras, e de vuestros fijos e descendientes para siempre jamas.[160]
Escudo usado motu proprio por los Colón a partir de 1502.
El escudo concedido por los reyes fue modificado pronto por los Colón, si bien estas modificaciones fueron hechas de "motu proprio", así en 1502 en la publicación del Libro de los Privilegios[n. 14] se imprime en la portada un nuevo escudo. Este presenta las siguientes diferencias con el escudo oficial: las armas del primer y segundo cuartel fueron modificadas para representar las de Castilla y León, las islas del tercer cuartel fueron modificadas acompañándolas de una "tierra firme" en punta, con el fin de añadir las nuevas tierras continentales ya descubiertas, y el cuarto cuartel colocaron cinco anclas para señalar su dignidad de Almirante, pero no derechas, sino tumbadas hacia la derecha; las armas primitivas, las que "soliades tener" según el decreto real, fueron trasladadas a un "entado" inferior.[161]
Las naves del primer viaje
Para el primer viaje Colón utilizó tres naves, dos carabelas y una "nao", aunque comúnmente se conocen como las "Tres Carabelas": la Santa María, la Pinta y la Niña.
La Santa María
Artículo principal: Santa María
La Santa María no era una carabela, en contra de lo que la apelación colectiva tradicional de las "Tres Carabelas" afirma. Se trataba de una carraca (nao en el lenguaje náutico español de la época). Con sus tres palos era una carraca menor construida, al parecer, en Galicia[162] (razón por la cual fue llamada originalmente La Gallega) y era propiedad de Juan de la Cosa. De acuerdo con las normas de estiba de entonces, la Santa María podía llevar una carga de 106 toneladas de la época (51 toneladas actuales).
En el palo mayor aparejaba dos velas cuadradas: la mayor con una cruz roja en el centro y una vela de gavia. El trinquete portaba una sola vela cuadrada y el palo de mesana aparejaba una vela triangular latina. Del bauprés colgaba una vela de cebadera. La Santa María se hundió en aguas del Caribe durante el primer viaje.[163]
Réplicas de la Pinta, la Niña y la Santa María en el Muelle de las Carabelas de Palos de la Frontera.
La Pinta
Artículo principal: La Pinta
La Pinta había sido construida en los astilleros de Palos pocos años antes del primer viaje. Fue elegida por Martín Alonso Pinzón por sus cualidades náuticas, ya que él mismo la había alquilado anteriormente. La costeó el concejo de Palos. Su nombre hizo pensar a algunos historiadores que pertenecía a la familia Pinto, pero en realidad fue alquilada a los armadores Gómez Rascón y Alonso Quintero, que fueron en ella a América como marinos. Probablemente su verdadero nombre fuera La Pintá.
Era una carabela nórdica de velas cuadradas con un velamen muy sencillo. Los palos de mesana y mayor iban aparejados con una vela cuadrada de grandes dimensiones, en tanto que el trinquete portaba una vela latina. La principal característica de esta carabela era su velocidad, hasta el punto que Colón, en su diario de a bordo, hacía referencia a que en una noche había navegado a 15 millas por hora (una milla de la época equivale a 0,8 millas náuticas actuales, por lo que su velocidad sería de unos 11 nudos, la misma que un carguero medio de la actualidad).[163]
La Niña
Artículo principal: La Niña
La Niña era una carabela de velas latinas que pertenecía a los hermanos Niño de Moguer, de ahí su nombre. Antes de formar parte de la expedición su denominación era la Santa Clara. Esta embarcación se construyó en los antiguos astilleros del puerto de la Ribera de Moguer entre 1487 y 1490. Fue elegida por los Pinzón por ser muy maniobrable. También la costeó el concejo de Palos.
Las velas de la Niña carecían de rizos, por lo que no tenían sistema de cabos que permitiera reducir la superficie en caso de fuerte viento. Las jarcias que sostenían los palos estaban enganchadas en los costados del buque. La carabela carecía de castillo de proa, mientras que el alcázar era bastante pequeño. Al llegar a las Islas Canarias se le cambió el velamen y se le pusieron velas "redondas" en lugar de las tradicionales "latinas" que portaba.[163] Es posible que, durante el primer viaje, la Niña fuera convertida en carabela de velas cuadradas durante la escala en Canarias.[164] Posiblemente formó parte también del segundo y tercer viaje de Colón,[165] recorriendo en el transcurso de sus viajes más de 25.000 millas náuticas en total.